domingo, 19 de junio de 2011

Procrastinación...el arte para evitar vivir

                  "... teniendo por mejor en mis verdades  
                   consumir vanidades de la vida
                   que consumir la vida en vanidades"
                                                  S.J. I. de la Cruz


Siempre me ha pasado que una voz repite en mi mente palabras nuevas, raras o cuyo sonido o escritura me llenan de admiración por su belleza. Esa incesantemente voz, que no es la mía ni la de nadie más sino simplemente una voz, repite esa palabra como si fuera la unica manera de recordarlas para siempre, aprenderlas, sentirlas y jamás olvidarlas. Y es así que cuando escucho a alguien decir "algarabía" o veo que alguien escribe "lotananza" mi amor por las palabras crece renace, me enloquece.

Cuando por azares del destino, por que uno siempre se empecina en culpar al destino de males mayores, me hizo cruzarme con ella me pareció que un golpe asestaba mi cara. Verbo que se convirtió en sustantivo, 15 letras que resumen estos largos meses en que me he ausentado de mi propia vida. Bella, larga y aguda, apareció ante mi y cual amor a primera vista, quise saber todo sobre ella. De origen latino, no solo refiere a una acción, remite todo un estilo de vida en este siglo: Procrastinación. Impronunciable para algunos, de entrada suena con más violencia que a los hechos que refiere.

Acción o hábito de aplazar situaciones de importancia, sustituyéndoles por otras más irrelevantes y agradables. Postergar, como si de esa manera pudiesemos evitar el presente, engañar al futuro, estancarnos en lo inmediato, abandonandonos a placeres hedonistas para evitar vivir.


Posterior al embelesamiento que me produjo la palabra y el sobresalto que me causo su significado, inevitable fue la reflexión alrededor de su éste, para encontrarme inmersa en él. Y que si no, han sido estos meses frente a este monitor, sin cosa más perentoria que dar click en "me gusta" "RT" y "follow", como si esa manera pudiera dar un poco de sentido a mi vida. Como si de esa manera algun ser humano pudiese dejar constancia de su existencia.

Lo más peligroso de la procrastinación es extenderla a todos los ámbitos de la vida, es decir, cuando aplazamos no solo tareas del trabajo y la escuela, sino también desiciones trascendentes de nuestra vida por temor al fracaso, cuando por obesesos preferimos la estabilidad, el dejarse llevar por la corriente o peor, realizando las tareas hasta el último momento.

"¿Por que no te has titulado?,¿Cuándo vas a terminar la tesis?, ¿Cuándo vas a conseguir un trabajo <>?, ¿Cuándo vas a volver a escribir?  Frases como ésas resuenan en mi cabeza recordandomeel coma intelectual que ha acaecido en mi vida. Procrastiné todo este tiempo como acto de superviviencia para evadir la realidad: el miedo a nunca llegar a ser todo lo que quise. Durante este tiempo he tenido el deseo interminable de ausentarme de mi propia existencia.

Razones, tal vez son muchas y ninguna de ellas justificable (que si te han dejado, que si tu vida se hizo pedazos, que si perdiste la inspiración), sentada aqui frente a la taza de café, tabaco en mano, pienso en las razones para dejar de procrastinar en mi vida. Matar esa palabra tan hermosa, para crear otras que llenen mi existencia, palabras tal vez no tan hermosas, no tan presuntuosas pero que me permitan existir.

Que si ya voy a "echarle ganas" que si ahora si voy a "titularme", pues no sé. Hecho si es que buscaré la hilaridad en mi vida nuevamente a traves de las palabras, que, ya sean brillantes o faltas de talento, sus vocecillas no volveré a ignorar. He dicho.

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